La elección de Roberto González Vaesken como precandidato colorado a la intendencia de Ciudad del Este provocó un quiebre en el Clan Zacarías Irún. Gracias a las gestiones del diputado Luis "Tiki" González Vaesken y el empresario tabacalero José Ortiz, el exgobernador logró la venia del comando cartista para ir a las urnas en nombre del sector oficialista y el ala disidente de la ANR, pero la apuesta presenta sus riesgos.

González Vaesken tendrá que congregar a los diversos equipos de Alto Paraná antes de medirse con Daniel Mujica, el candidato de Miguel Prieto, líder de Yo Creo y artífice de la alianza con el PLRA para bloquear el regreso de la ANR al ejecutivo comunal. La decisión del comando era necesaria para poner en movimiento la estructura partidaria en el Este, aunque aún queda por ver cómo se resuelve la interna dentro de Honor Colorado.

El Clan Zacarías está integrado por dos matrimonios, uno entre el senador Javier Zacarías Irún y Sandra McLeod, exintendentade Ciudad del Este -removida del cargo por irregularidadesadministrativas mediante una intervención-, y otro entre Rocío Abed, líder de la bancada oficialista en Diputados, y Justo Zacarías Irún, director de Itaipú. A diferencia de los segundos, los primeros pusieron el grito en el cielo cuando trascendió la postulación.

Miguel del Puerto con Rocío Abed.

Es que la familia tiene la hegemonía sobre 13 de las 16 seccionales. De hecho, Javier Zacarías movilizó a sus presidentes para que ventilaran el malestar por la "imposición" de González Vaesken, devenido en paladín de la concordia colorada, en un intento por sumar presión y así reabrir las negociaciones por la chapa esteña. 

"Creo que el ritual normal del Partido Colorado es elegirnos entre nosotros y ahí sacar un candidato. Con mucho respeto. Acá somos respetuosos con lo que defina el comando de Honor Colorado, lógicamente yo respetaré, pero los dirigentes vienen a manifestar su inquietud", comentó Zacarías esta semana, en una conferencia junto a los presidentes de seccionales que responden a su equipo en Alto Paraná.

Los convencionales del departamento negaron la bronca entre las bases y pidieron a la dirigencia de Hernandarias y Presidente Franco apostar por la unidad para recuperar ambas administraciones

Pero los convencionales del departamento negaron la bronca entre las bases y pidieron a la dirigencia de Hernandarias y Presidente Franco apostar por la unidad para recuperar ambas administraciones comunales. A través de un comunicado, el Consejo de Convencionales del Alto Paraná aseguró que las expresiones de los presidentes de seccionales que se presentaron con el senador no tienen legitimidad y solo buscan generar confusión y precipitar una división en el partido.

Justo Zacarías Irún. 

"Queremos dejar en claro que la candidatura de RobertoGonzález Vaesken cuenta con un amplio respaldo dirigencial y ciudadano. Y solicitamosque las autoridades del partido desestimen las manifestaciones infundadas porquienes lejos de construir quieren dividir la unidad", sostiene el comunicado.

Desde el sector de González Vaesken admitieron que los presidentes de seccionales que saltaron a favor de McLeod cuentan con el beneficio de cargos e intereses que dependen directamente del senador, cuyo hermano está al frente de la binacional y dispone de recursos para garantizar la lealtad en su bastión político.

Según pudo saber LPO, el precandidato recibió el apoyo de Abed y Justo Zacarías, quienes le enviaron un mensaje para transmitirle su total acompañamiento y aclararle que tomarían distancia de cualquier jugada de Javier Zacarías y McLeod que pudiera embarrar la cancha.

"Existe una orden, incluso del propio presidente del partido (Horacio Cartes), de evitar sacarse fotos con el senador Javier Zacarias. Lucho y la diputada Abed tomaron distancia de Javier para evitar perder la dirección de la binacional ante la amenaza directa de Cartes", puntualizó una fuente del comando cartista a este medio.