“Ella no presentó los efectos secundarios del medicamento, esperados a los un mes de la aplicación, como es un virus el que ingresa al organismo produce inflamación en el hígado y otras complicaciones por el hecho de que consume también corticoides, un medicamento muy fuerte”, comentó.

Maíz refirió que su hija recibe asistencia de hepatólogos de Canadá ya que no hay médicos de esa especialidad en Paraguay.

Destacó que los primeros tres meses tras haber recibido el Zolgensma son los más críticos en lo que respecta a la evolución de la niña, quien recibió el tratamiento contra la Atrofia Muscular Espinal (AME) que padece.