Medvedev, ex número 1 del mundo y ganador de un Grand Slam en Estados Unidos, cayó de nuevo en primera ronda. Esta vez lo hizo ante un casi desconocido del circuito, de 23 años, 172 del ránking, que ingresó en el cuadro final a través de la fase clasificatoria.

Medvedev había nutrido esperanzas de favoritismo en Roland Garros tras su reciente triunfo en Roma, pero Seyboth Wild le puso los pies en la tierra.

El autor de la mayor gesta en lo que va de torneo coqueteó con ingresar entre los 100 mejores cuando en 2019 se hizo con el torneo de Santiago de Chile, pero los problemas físicos le hundieron hasta más allá de los 400. En 2020 jugó en el Abierto de Estados Unidos su primer partido en un Grand Slam, pero desde entonces desapareció de los puestos altos de la clasificación.

 A finales del año pasado fue recuperando el buen juego en los torneos de segunda fila, una racha que ha conseguido mantener esta temporada, en la que al fin logró superar la previa de un Grand Slam.

La mejora de Seyboth fue patente contra un Medvedev que sigue arrastrando una pesadilla en Roland Garros, al tiempo que la animadversión del público, que él alimenta.

Seyboth Wild se medirá por un puesto en tercera ronda contra el ganador del duelo entre el francés Quentin Halys y el argentino Guido Pella.