De preparar las ollas populares en los comedores, surgió la oportunidad de formalizar sus vínculos maritales y también más de un centenar de niños y jóvenes pudieron recibir el sacramento del bautismo.

Todo esto ocurrió ayer. Un total de nueve parejas de escasos recursos pudieron formalizar sus relaciones en el marco de una boda comunitaria en una misa en la Catedral Metropolitana, presidida por monseñor Edmundo Valenzuela, arzobispo de Asunción.

Es la primera vez, en todos estos meses de pandemia, que se llevan a cabo rituales religiosos con mucha gente. Ambas celebraciones, una a la mañana y otra a la tarde, se realizaron con todas las medidas sanitarias por el Covid.

“Esto es el culmen de un año en el cual el Arzobispado de Asunción estuvo apoyando todas las ollas populares: más de tres millones de platos que se dieron en esta pandemia”, explica el diácono Bernardo Figueredo.

Las parejas beneficiadas son de la zona de Cerrito (Chaco) y Trinidad y estaban involucradas en los trabajos del Comedor Chiquitunga. “Quisimos hacer tanto la parte material como la espiritual como son los sacramentos. “Todos los martes estábamos entregando víveres a los diez comedores y hacíamos la evangelización, y ahí surgió la idea de si querían regularizar su situación marital. Son personas que tienen ya 20 o 30 años de relación, que tienen hijos y algunos nietos”, cuenta. Entre los recién casados había gente de la tercera edad, como una señora de 68 años.

Y, claro, vieron la posibilidad que se les ofrecía y recibieron de buen grado esa oportunidad porque “realmente la parte económica es una barrera para no acceder a los sacramentos, ya que son personas carenciadas”, dice.

Entre las 16:00 y 17:00 tuvieron lugar los bautismos colectivos, donde por tandas de 50, más de 100 niños y jóvenes de las zonas señaladas recibieron la ablución.

Asegura que hay mucho entusiasmo en las comunidades, ya que los vecinos fueron testigos del proceso de la evangelización para la boda. “Están muy entusiasmados, pero por el momento esto es el inicio”, apunta.

100 niños y jóvenes de barrios carenciados que no fueron bautizados recibieron ayer el sacramento en la Catedral.