El propietario del local, identificado como Guilherme De Campos Lemes, de nacionalidad brasilera, manifestó que fue alertado por la empresa de seguridad Prosegur, al activarse la alarma de dicho depósito, por lo que uno de los guardias de seguridad, de nombre Gabriel Raúl Meza Fleitas, llegó hasta el sitio y fue reducido por los supuestos autores, quienes le despojaron de una escopeta y sus pertenencias y procedieron a alzar en una furgoneta Toyota Hiace, de color blanco, 60 máquinas de criptomonedas, que tienen un valor de USD 500 cada una, es decir, que totalizan USD 30 mil.

El brasileño y un familiar fueron a la comisaría a radicar la denuncia y la vuelta se cruzaron con los marginales y empezaron a seguirlos, llamaron a la Policía y filmaron toda la persecución. Minutos después se sumaron dos patrulleras, una de la comisaría 5ª y la otra de la comisaría 24ª, que comenzaron a perseguir o, mejor dicho, a escoltar a los bandidos sobre la calle 40 de la ciudad, a una vergonzosa velocidad de 60 km/h. En un momento dado, los bandidos ingresaron a el barrio Bella Vista y ahí, llamativamente, lograron “perderse”, pese a que las dos patrulleras estaban casi lado a lado con la furgoneta cargada y que no podía siquiera tomar velocidad.

Esta imagen es más que elocuente. Las patrulleras de las comisarías 5ª y 24ª “escoltando” a la furgoneta de los delincuentes y en un punto dado llamativamente se esfumaron.

INÚTILES O CÓMPLICES

El vídeo de la persecución se viralizó en las redes sociales y todos los internautas coincidieron en que los policías que participaron del procedimiento son inútiles o cómplices de los marginales, a quienes prácticamente escoltaron y dejaron escapar en vez de cruzarse en su camino, chocarlos o hacerlos parar de cualquier manera.

MÁQUINAS NUEVAS

El abogado Rolando Cáceres Salvioni, representante legal de la víctima, aclaró al diario La Clave que las máquinas mineradoras de criptomonedas son nuevas, y no usadas y en reparación como lo afirmó el comisario principal Gerardo Vega, titular de la comisaría 24ª, jurisdiccional, quien aparentemente estaría implicado en el caso.

Fuente: La Clave