La declaración se inició en la siesta de este sábado y tras ello se estaría imputando a todos por simulación de un hecho punible, cuya expectativa de pena va hasta los 10 años de cárcel.

El caso se inició el 26 de julio pasado con el secuestro de Juan Carlos Olmedo quien es peón de la estancia Pindoty, ubicada en el distrito de Tacuatí y hermano del administrador de la finca.

En un primer momento todo los secuestradores pidieron para la liberación del peón US$ 150.000, dando un plazo de 48 horas. Luego, el monto subió a US$ 200.000 tras comunicarse con la familia de Olmedo.

Para las autoridades el hecho no fue perpetrado por miembros del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) o algunas de sus ramificaciones. Se pensó que era otro grupo el que se llevó a Olmedo, quien luego de dos días finalmente apareció. Se lo encontró dos días después en la zona de Horqueta.

La versión que dio Olmedo fue investigada y al parecer cayó en contradicciones, hasta que la Policía llegó a conclusión que el tema se trató de una autosecuestro y que el trasfondo era sacarle plata al hermano.

Por esa razón ahora Juan Carlos Olmedo y otras cuatro personas están detenidas y se exponen a ser procesados.