Los ciudadanos paraguayos asesinados fueron identificados como Felipe Rivas Ojeda, de 28 años, y Marcos Sanchelaridi, de 27 años. Sus cuerpos habían sido encontrados este lunes en un asentamiento en el municipio de Aral Moreira, en el Brasil.

Sus familiares se constituyeron este martes hasta la capilla mortuoria de Ponta Porã, donde funciona el Instituto Médico Legal de esa ciudad, y reconocieron a las víctimas, informó el periodista de Última Hora Marciano Candia.

Ambos hombres vivían en la ciudad de Capitán Bado, Departamento de Amambay. Según reporte de la Policía Civil del Brasil, uno de ellos tenía antecedentes policiales en nuestro país y otro había sido liberado recientemente de una penitenciaría.

Los cadáveres fueron encontrados envueltos en bolsas negras y atados, tenían signos de tortura y uno de los cuerpos tenía una bolsa en la cabeza.

Se tiene previsto que los fallecidos sean trasladados hasta la ciudad de Capitán Bado para que sean sepultados.