Aunque en las últimas horas la intensidad de la lluvia disminuyó ligeramente, la alerta roja meteorológica todavía está vigente en la región, donde ya se registran varios muertos y cientos de personas evacuadas.

En ese contexto, a tres días del inicio del Gran Premio en Imola, la Fórmula 1 informó que se canceló el evento. “La decisión se toma porque no es posible celebrar el evento de manera segura para aficionados, equipos y personal, y es lo más responsable vista la situación a la que se enfrentan las localidades y ciudades de la región. No sería apropiado poner más presión sobre las autoridades locales y servicios de emergencias en este momento difícil”, dice el comunicado.

Stefano Domenicali, CEO del campeonato, habló de “tragedia en Imola y Emilia Romaña (se habla de al menos tres víctimas mortales)”; y Mohammed Ben Sulayem, presidente de la FIA, subraya que “la seguridad de todos y los esfuerzos de recuperación son la única prioridad en este momento”.

La F1 ya envió a todo el personal del paddock a los hoteles porque el cauce del río Santerno bajaba muy abultado a escasos metros del circuito de Imola. Los espacios de Fórmula 2 y Fórmula 3, o la zona técnica de televisiones, presentaban ligeras inundaciones.

La carrera de Imola tiene la esperanza de poder acoplarse al calendario más adelante, pero las apreturas de fechas lo convierten en inverosímil. Esta temporada había 24 carreras previstas, aunque la cancelación del GP de China en abril y este desafortunado evento en Italia pueden dejar la cuenta en 22. / AFP /