"Su corazón dejó de latir. Nos ha dejado", anunció Anas Fakhri, quien quiso añadir que su padre era una leyenda en Alepo y en Siria, y que las leyendas nunca mueren.

Nacido en Alepo (noroeste), cuna de la canción en Siria, Sabah Fakhri representó con su poderosa voz la canción tradicional árabe, sobre todo los "Muwashahat andaluces" y el "qudud de Alepo".

Infatigable, Fakhri era capaz de cantar durante horas, repitiendo sin descanso estrofas de poemas árabes clásicos o contemporáneos.

En 1968, en Caracas, batió el récord de horas cantando sin descanso, 10.

En su juventud, Sabah Fakhri ingresó al conservatorio de música árabe de Aleppo. Luego, perfeccionó sus estudios en la academia musical de Damasco graduándose en 1948.

Tras su estudios académicos, decidió viajar a El Cairo (Egipto) para aprender de los mayores exponentes de la música árabe de la época, al mismo tiempo comenzó a dar conciertos en Siria.

Su talento hizo que alcanzara el éxito en el mundo árabe y su fama traspasó fronteras al llegar a realizar conciertos en Europa y América.

FUENTE: AFP