Tan solo cinco horas después, la Asociación Nacional Republicana (ANR), a través de sus redes sociales, difundía también un audiovisual donde se observaban a varios presidentes de seccionales organizando ollas populares como celebración del día de la amistad. 

Esto llamativamente fue aplaudido por Mario Abdo Benítez, presidente de la República, también en sus redes sociales, quien unas horas antes era criticado al respecto por la legisladora liberal. Este gesto de Abdo de aprobación a lo que hicieron las seccionales fue blanco de cuestionamientos por parte de los usuarios de la mencionada red social. 

Estos cuestionamientos también hicieron eco en el Senado. Específicamente, Hugo Richer, senador por el Frente Guasu, expresó que si bien mucha gente está viviendo hoy día de las ollas populares, esto se produce por una incapacidad del Gobierno. 

“El Ejecutivo no tiene políticas claras en cuánto a la reactivación económica. Por eso estamos en esta situación. No tiene la capacidad de gestión para que podamos avanzar”, cuestionó. 

MISMO JUSTIFICATIVO

Al ser consultado sobre del por qué, Mario Abdo carece de ideas sobre políticas efectivas para sobrellevar la problemática, señaló que la responsabilidad la tiene exclusivamente él (Abdo) al no cambiar a un equipo que no está funcionando. 

“Esto ya viene desde la época de la dictadura. En aquella época también se responsabilizaba a la gente que rodeaba a Stroessner de incapacidad. Pero tampoco eran cambiados”, rememoró. 

PARTIDIZACIÓN

Sobre las ollas populares que organizaron seccionales coloradas y que se viralizaron en las redes sociales, el legislador expresó su preocupación. Ya que mucha gente depende de esto para alimentarse y no se debe politizar algo tan sensible. 

“Instrumentar la necesidad de la gente es criticable. En el interior, mucha gente vive de esto y sería muy perjudicial mezclarla con cuestiones políticas”, mencionó. 

ABANDONDO

Ramón Fogel, sociólogo, analizó también la situación. Para él, las ollas populares reflejan la solidaridad por un lado pero al mismo tiempo el abandono por el otro. 

“Estas accionen reflejan la solidaridad que nace ante un Estado que no está llegando. Son respuestas de emergencia pero no pueden ser permanentes. El Gobierno debe proponer alternativas para que no se dependa de esto mucho tiempo”, explicó. 

Finalmente el sociólogo instó a concretar la reforma del Estado ya que sin ella, muchos cambios importantes no se podrán concretar.  

“El problema que existe es de fondo. Se requiere de una reforma del Estado. Un cambio que permita volver a la idea central de recaudar impuestos para redistribuir nuevamente a toda la ciudadanía y que no dependan de la solidaridad para alimentarse”, puntualizó.