El Informe Mundial sobre las Drogas de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) mostró que en 2023, el último año para el que se dispone de datos completos, el comercio de cocaína iba viento en popa.

"La producción, las incautaciones y el consumo de cocaína alcanzaron nuevos máximos en 2023, lo que convierte a la cocaína en el mercado de drogas ilícitas de crecimiento más rápido en el mundo", señaló en un comunicado la UNODC, con sede en Viena.

Desde la perspectiva de la oferta, su producción ilegal, estimada a nivel mundial, aumentó alrededor de un tercio, hasta alcanzar la cifra récord de más de tres mil 708 toneladas, debido principalmente al aumento de la superficie dedicada al cultivo ilícito de arbusto de coca en Colombia y a datos actualizados que mostraron que la producción en ese país era aproximadamente un 50% superior a la del 2022.

El número estimado de consumidores de cocaína a nivel mundial también siguió creciendo y alcanzó los 25 millones de personas en 2023, frente a los 17 millones de 10 años antes, según la UNODC.

"América del Norte, Europa occidental y central y América del Sur siguen constituyendo los mayores mercados de cocaína, sobre la base del número de personas que consumieron drogas en el último año y de los datos derivados del análisis de las aguas residuales", señaló.

El mercado de las drogas sintéticas también sigue en expansión, favorecido por los bajos costes operativos y el menor riesgo de detección para quienes las fabrican o pasan de contrabando, según el organismo.

Las drogas más consumidas son los estimulantes de tipo anfetamínico (ETA), como la metanfetamina y la anfetamina.

"Las incautaciones de ETA alcanzaron un récord en 2023 y representaron casi la mitad de todas las incautaciones mundiales de drogas sintéticas, seguidas por los opioides sintéticos, entre ellos el fentanilo", dijo la UNODC.