Sánchez subrayó las políticas introducidas por su gobierno que, a su parecer, han ayudado a España a "avanzar", y abogó por leyes más estrictas contra la violencia doméstica.

"Avanzaremos aboliendo la prostitución que esclaviza a las mujeres en nuestro país", aseveró durante el discurso pronunciado en Valencia, sin brindar más detalles.

Pese a que la explotación sexual y el proxenetismo son ilegales en España, la prostitución no está regulada por ley. No se castiga a los que ofrecen servicios sexuales por voluntad propia, siempre y cuando no se haga en espacios públicos, mientras las leyes están enfocadas en la lucha contra el tráfico de personas.

Aunque no se reconoce como empleo corriente, existe un gran número de prostíbulos en todo el país y muchos funcionan en hoteles y otros centros de alojamiento.

Uno de cada tres hombres en España ha pagado por mantener sexo al menos una vez en su vida, de acuerdo a un sondeo realizado en 2009 por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

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