Además del bochorno internacional que significa esta nueva transa, preocupa el silencio del presidente Mario Abdo Benítez, quien en todo el día de ayer no dio a conocer ninguna postura en relación al caso, por lo que, entrevistado en Tempranísimo, por la 970 y GEN, Peña dijo que “yo creo que el presidente se está boicoteando el mismo; tiene que darse un sacudón. Tiene un modus operandi que cuando salta un caso de corrupción, fuerza la renuncia de sus colaboradores pero deja la sensación de que no toma las decisiones. Si una persona le está perjudicando y ese acto de corrupción le implica, y no le saca, se está boicoteando él mismo. Yo propongo que eche a las personas. Y si actuaron con su aval, tiene que dar la cara”.

“El presidente tiene que destituir a (Denis) Lichi (caso Texos Oil) y a (Juan Ernesto) Villamayor (caso PDVSA) o salir a explicar de qué trataron las negociaciones. Capaz que no sabemos algo; pero si se hicieron de manera indebida, tiene que separar a estas personas de su cargo”, añadió.

Afirmó que indigna “encontrar esta situación, enterarnos por Washington Post, apenas dos semanas del caso Texos, que todavía no se resolvió, te rebela. Es importante que la ciudadanía sepa cómo se ha manejado en el pasado este tipo de negociaciones”.

En cuanto a la comisión de 26 millones de dólares que debía recibir un abogado, Peña manifestó que “son documentos públicos. No había ninguna comisión, ninguna diferencia. Solo el monto de la deuda. En el caso de Texos, de los 7 millones de dólares, 3 estaban documentados. Quiere decir que no tienen confianza entre ellos. Me tocó trabajar en estos temas representando al Estado paraguayo. Si no había claridad, total transparencia, no se hacía, porque en estos casos no solo hay que ser, sino parecer”.

Todo esto tiene un costo muy alto porque es un golpe a la credibilidad y la confianza del gobierno, que es un bien intangible fundamental, y mucho más cuando Paraguay está en puertas de la negociación más importante de su historia, la del Anexo C de Itaipú, explicó Peña, añadiendo que “esto se va a discutir a nivel internacional y les perjudica a ellos mismos porque elimina toda pisca de credibilidad y esto no hace bien, de cara a la negociación tremendamente importante que es Itaipú”.