El ciudadano de nacionalidad brasileña, identificado como Wilson Francisco Neto Pintos, de 31 años, manifestó que no pudo pagar por una carga de marihuana perteneciente a un tal Xiru, presunto narcotraficante de Foz de Yguazú, Brasil, quien le exigió que acabe con la vida de una persona para saldar la deuda, informó Telefuturo.

Neto Pintos dijo que llegó el miércoles pasado a la ciudad de Juan León Mallorquín, luego de haber sido contratado para acabar con la vida del subcomisario Fernando Ariel Ruiz Díaz Ortega, de la División del Comando Tripartito, quien afortunadamente resultó ileso en el atentado registrado en la mañana de este lunes.

Manifestó a periodistas tras su detención que esta persona es de nacionalidad brasileña y que desconoce si está preso o libre y que ni siquiera lo conoce personalmente, ya que obtuvo la droga a través de una tercera persona.

"Yo de su gerente agarré la marihuana, yo agarré de una persona que trabaja para él, compré marihuana, fui preso, salí de la cárcel pero no conseguí pagar la marihuana, y si no hubiese hecho este servicio, ellos atentarían contra mi familia", expresó en conversación con los medios de comunicación.

Comentó que llegó en compañía de sus otros dos cómplices identificados como Adriano Benites Lima y Andres Niñez Silva. Aseguró que el que lideraba "el trabajo" era Benites, quien sería el líder de la facción criminal conocida como "Os Manos", condenado a 55 años en el Brasil por homicidio, asalto, narcotráfico y otros hechos punibles.

Dijo que le contrataron para asesinar a una persona y que él desconocía que la víctima era un agente de la Policía Nacional y tampoco sabía el motivo.

En poder de los tres detenidos se encontraron un fusil M4, chalecos antibalas, varias municiones y documentaciones de la víctima, que serán sometidos a peritaje.

El atentado

El subcomisario Fernando Ariel Ruiz Díaz Ortega se desplazaba a bordo de una camioneta de la marca Toyota Fortuner saliendo de una calle del barrio San Francisco de Juan León Mallorquín.

Antes de salir a la ruta PY02, a la altura del kilómetro 261, fue interceptado por otra camioneta de color gris, que se le colocó en frente y le impidió que siga avanzando. Los ocupantes del rodado comenzaron a disparar a mansalva.

Durante el ataque, Ruiz Díaz Ortega reacciona rápidamente, también efectúa disparos, luego sale de su vehículo y huye del lugar, mientras los desconocidos continuaban baleando su camioneta.

Su camioneta quedó en marcha y embistió contra el rodado de los atacantes. En ese momento, varias personas descendieron del rodado y continuaron disparando contra el jefe policial, que finalmente logró salir ileso. Los sicarios abordaron nuevamente la camioneta y huyeron del lugar.

El vehículo acusó unos 15 disparos de arma de fuego en la parte frontal y un impacto en la parte trasera.