La causa está actualmente interinada por otro fiscal hasta que se resuelva la recusación contra la fiscala Daysi Sánchez. Según la defensa de los sospechosos, la agente del Ministerio Público violó la presunción de la inocencia de los sospechosos.

Llamativamente los abogados de los implicados recusaron a la fiscala tras casi dos años de haberse iniciada la investigación del caso y poco después de que aparecieron elementos importantes que sindican a Joel Guzmán Amarilla y su hermano José Gabriel Amarilla como los responsables de su desaparición.

La aparición de un testigo, que afirma haber visto a los sospechosos arrojando bolsas a un tajamar, y el hallazgo de sangre humana en la camioneta en la que estos habrían llevado los paquetes hasta el lugar, son elementos fuertes de sospecha contra Joel y José.

Falta de recursos

El Ministerio Público centró la búsqueda de Dahiana en un tajamar situado entre las localidades de Guarambaré y J.Augusto Saldívar. La operación se inició de forma artesanal y luego se sumaron maquinarias que eran financiadas con aportes.

Los recursos que permitían la búsqueda —en su mayoría donaciones— eran gestionados por la fiscala Daysi Sánchez, ante la insuficiencia de fondos por parte del Ministerio Público. Con la recusación a la fiscala, el rastrillaje del tajamar quedó suspendido.

La familia de Dahiana Espinoza lamentó esta situación y destacó el trabajo de la fiscala Sánchez.

“Nos preocupa bastante (su recusación), porque la fiscala Daisy Sánchez estaba realizando un buen trabajo y le están recusando ahora. Están tratando de entorpecer la búsqueda haciendo estas chicanas”, dijo Juan Espinoza, padre de la víctima.

Nuevas evidencias

En el lecho del tajamar inspeccionado, los intervinientes encontraron varias piezas óseas, pero una de ellas llamó la atención, en particular, por su consistencia y forma similar a la de una clavícula. Estos restos serán sometidos a varios análisis para determinar si son humanos.

Asimismo, mediante las pruebas de luminol, personal de Criminalística logró detectar algunas gotas de sangre dentro de la camioneta incautada y en la que supuestamente los sospechosos habrían trasladado las bolsas hasta el tajamar.

La Fiscalía sospecha que Dahiana Espinoza fue asesinada el mismo día de su desaparición y los responsables del hecho se deshicieron del cuerpo. La presunción es que el cuerpo de la mujer podría estar en el tajamar, aunque no se descarta que este fue retirado posteriormente del sitio.

El caso

Dahiana Espinoza, de 21 años, fue vista por última vez el 18 de setiembre de 2020, en J. Augusto Saldívar, Departamento Central. Desde aquella ocasión, la Fiscalía, sus familiares y amigos realizaron una intensa búsqueda y, al transcurrir un año y seis meses, pese a que sus restos no fueron aún encontrados, hay dos personas imputadas por feminicidio.

Se trata de su ex pareja Joel Guzmán Amarilla, recluido en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, tras ser también procesado por violencia familiar, y el hermano José Gabriel Amarilla, imputado por feminicidio en calidad de cómplice.

Luego de varios procedimientos en distintas propiedades, la Fiscalía confirmó que la mancha de sangre en el piso del baño de la vivienda, donde residía la joven, corresponde a la víctima. Además, se cuenta con más muestras de sangre humana encontradas en la vivienda habitada por la pareja, impregnadas en prendas de vestir del imputado, y otras.

La fiscala Daisy Sánchez logró obtener días atrás el relato de un testigo clave, cuya identidad se reserva el Ministerio Público, quien declaró que presenció el momento en el que, presuntamente, ambos acusados arrojaron varias bolsas de basura a la laguna en Guarambaré. Además, mediante pruebas de luminol, se hallaron gotas de sangre en la parte trasera de la camioneta de Amarilla.