El crimen ocurrió en un puesto policial desactivado de la colonia Potrero’i, en el distrito de Zanja Pytã. En aquel entonces, el suboficial Paredes se encontraba solo en las instalaciones cuando los ahora condenados llegaron al lugar. Aparentemente, tras una discusión, Fabio Ledesma Dos Santos realizó un disparo que impactó en la cabeza del agente, para luego ambos darse a la fuga.

La acusación en el juicio estuvo a cargo de la fiscal Katia Uemura, mientras que la querella fue representada por Alcides Burgos. La defensa de los condenados estuvo a cargo de los defensores públicos Ricardo Berau y María Victoria Ayala.

El abogado Alcides Burgos, al término de la condena, en conferencia de prensa, se mostró contento por la sentencia impuesta por el Tribunal, tras dos años de trabajo, ya que las evidencias presentadas a lo largo del juicio comprobaban la participación material de los ahora condenados en el crimen. "Por la gravedad del hecho considero que el Tribunal dio la condena justa con los elementos obtenidos a lo largo de la etapa probatoria", expresó.