Consideró que el contrato, realizado por la vía de la excepción, adolece de irregularidades y no puede tomarse como una “urgencia impostergable”.

“Habiendo otras necesidades en el Departamento Central, el gobernador se encarga de comprar calesitas, con una actuación dudosa. Logramos atajar esa licitación y estamos tras otras licitaciones para atajar”, sentenció.

El jefe departamental en situación de espera sostuvo que es de mala fe que un administrador realice llamados que comprometan el presupuesto de una futura gestión.

Estigarribia habló de otras llamativas licitaciones, como el llamado para la compra de software por valor de 2.500 millones de guaraníes, otra para una consultoría relacionada a la zonificación de algunas ciudades, compras de computadoras por valor aproximado de 1.000 millones de guaraníes, entre otras.

“Reparó la Junta Departamental por casi G. 1.100 millones.  Creo que la Gobernación tiene que estar en situaciones importantes que afectan al departamento: habilitar albergues, dotar de medicamentos a hospitales, no podemos pegarnos el lujo de adquirir calesitas”, insistió.

El exintendente de Villa Elisa dijo estar seguro de que se encontrará con una herencia de una pésima administración y mencionó que todavía no tuvo acceso a la Gobernación, ya que el gobernador Machuca no permitió la instalación de un equipo de transición.

“No hay apertura del gobernador Gustavo Machuca, yo pienso que este gobernador es peor al que salió (Hugo Javier González). Pero nosotros vamos a asumir y trabajar por Central”, aseveró.