El representante nacional, ministro Raúl Martínez, realizó el pronunciamiento durante la sesión ordinaria del organismo internacional, señalando que el Estado paraguayo soportó dos situaciones concretas que afectaron a nuestro país en el 2019.

Recordó cuando, de forma inconsulta, la Comisión de Ficheros de la INTERPOL dispuso el levantamiento provisional de notificación roja con relación a los ciudadanos paraguayos Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Colmán.  A raíz de esa situación irregular, estas tres personas procesadas por secuestro continúan prófugas de la justicia desde el 2003.

La notificación roja estuvo vigente hasta que en el 2019 llamativamente fue levantada, sin justificación alguna. Esta situación posibilitó el traslado de los tres supuestos secuestradores desde el Uruguay hasta Finlandia, en carácter de reasentados.

El otro caso resaltado por el ministro Martínez se refiere al colombiano Rodrigo Granda, requerido por la justicia paraguaya por homicidio doloso, secuestro y asociación criminal. El mismo, pese a soportar una notificación roja, no fue detenido por INTERPOL durante un viaje que realizó desde su país hasta otra nación sudamericana.

Contradictoriamente se lo mantuvo a resguardo durante su viaje para posteriormente indicarle que debía volver a Colombia para evitar la detención, lo cual sucedió finalmente, señala el informe.

Igualmente, durante la reunión, se instó a los estados miembros de la INTERPOL a realizar una profunda reflexión sobre la actuación de la organización en ciertos casos que dañan su credibilidad y que atentan contra la seguridad de la región.